Científicos de la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), en Suiza, desarrollaron un nuevo plástico muy parecido al PET, que se fabrica de las partes no comestibles de las plantas.
Este nuevo plástico tiene las propiedades del plástico tradicional.
- Es duro
- Resistente al calor
- Tiene una buena barrera contra gases como el oxígeno
Lo que lo convierte en una buena opción para el envasado de alimentos y además por el tipo de su estructura también puede reciclarse químicamente y degradarse hasta convertirse en azúcares inocuos en el medioambiente.
Según los autores, cada vez está más claro que alejarse de los combustibles fósiles y evitar la acumulación de plástico en el medio ambiente es fundamental para terminar con los problemas del cambio climático. Para esto se están realizando esfuerzos considerables para desarrollar polímeros degradables o reciclables a partir de material vegetal no comestible conocido como «biomasa lignocelulósica».
Recalcan que no es fácil producir plásticos que puedan competir con los demás a base de biomasa y hay una razón por la cual los plásticos tradicionales son tan populares, porque combinan bajo costo, estabilidad térmica, resistencia mecánica, procesabilidad, compatibilidad y propiedades que cualquier sustituto del plástico debe igualar o superar, por lo que la tarea hasta ahora ha sido algo difícil.